Declaración de Fe
Conoce los principios o Declaración de fe que rige los valores del Seminario Teológico Bereano.
NOSOTROS CREEMOS:
SECCIÓN 1: EN LAS ESCRITURAS
Creemos que las Sagradas Escrituras, el Antiguo (39 libros sin contar los libros apócrifos) y Nuevo Testamento (27 libros), son inspiradas verbalmente por Dios y están sin error en el original. La Santa Escritura es la revelación completa de Dios para la salvación del hombre y es la única autoridad divina y final para la fe, vida y conducta del cristiano. [II Pedro 1:20-21; II Timoteo 3:16-17; Apocalipsis 22:18-19]
SECCIÓN 2: EN UN DIOS VERDADERO
Creemos en un solo Dios quien es un Ser vivo y espiritual, el Creador de todas las cosas, Infinito, Perfecto, Eterno e Inmutable. Dios existe en tres personas; Padre, Hijo y Espíritu Santo. Las tres personas son uno en naturaleza, atributos, propósito y esencia, pero tienen distintas personalidades y funciones. [Génesis 1:1; Deuteronomio 6:4; Juan 4:24; Juan 10:30; Lucas 3:22; Juan 15:26; II Corintios 13:14; Mateo 28:19]
1. Dios Padre
Dios Padre reina sobre Su universo y Sus criaturas con amor, misericordia y justicia. Él es el autor y la fuente de la redención de los hombres y la nueva creación. Él es el Padre en verdad a los que vienen a ser hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús. [Salmo 47; Salmo 97; Salmo 103; 15-19; I Pedro 1:2; Apocalipsis 21:1; Juan 1:12]
2. Dios Hijo
Jesucristo es el Hijo Eterno de Dios Padre. No tiene principio ni tendrá fin. En persona y naturaleza es perfectamente Dios. En el plan de Dios para la redención, Jesús fue concebido por el Espíritu Santo y nació de la virgen María. Así se hizo hombre y era a la vez divino y humano, Dios y hombre. Creemos que murió físicamente en la cruz, y que, siendo a la vez Dios y hombre, fue el sacrificio perfecto y completo para los pecados de la humanidad. Creemos que Él resucitó corporalmente y ascendió a los cielos donde está ahora sentado a la diestra de Dios Padre. Creemos que vive para interceder por nosotros como nuestro Sumo Sacerdote, el único mediador entre Dios y los hombres. [Juan 1:1-14; Juan 8:54-59; Juan 17:5; Hebreos 1:8; Lucas 1:30-35; Isaías 9:6; Filipenses 2:5-11; I Corintios 15:3-8; Lucas 24:36-43; Hebreos 4:14-16; I Timoteo 2:5]
3. Dios Espíritu
Creemos que el Espíritu Santo es una persona de la Trinidad, igual con Dios Padre y Dios Hijo. Él convence al mundo de pecado, de justicia y de juicio. Él llama a los hombres al Salvador y los regenera. Al momento de la salvación, el Espíritu Santo de una vez y para siempre bautiza, sella y viene a morar en todos los creyentes. El llena, guía, ilumina y da poder a los creyentes dispuestos a una vida santa y para el servicio cristiano. [Juan 16:7-14; Hechos 1:8; Hechos 5:3-4; Tito 3:5; I Corintios 2:9-12; I Corintios 3:16; I Corintios 12:13; Efesios 1:13-14; Efesios 4:30; Efesios 5:18; Romanos 8:9, 16; Romanos 5:3-5; Gálatas 3:13-14]
SECCIÓN 3: EL HOMBRE
Creemos que el hombre fue creado directamente por Dios y a la imagen de Dios. Fue creado inocente y perfecto, pero con voluntad propia. Por su voluntad, el hombre pecó contra Dios y el pecado entró en el mundo. Desde el pecado original todos los hombres nacen con una naturaleza pecaminosa, separados de Dios y bajo la condenación de su pecado. El hombre natural por si mismo está totalmente privado de solucionar esta condición. [Génesis 1:26; Génesis 2:7; Romanos 3:10, 23; Romanos 5:12-21; Romanos 6:23; Efesios 2:1-2]
SECCIÓN 4: LA SALVACIÓN
Creemos que la salvación es única y totalmente por la gracia de Dios por medio de la fe en Cristo Jesús aparte de cualquier obra humana. Dios provee la salvación por la sangre derramada de Cristo Jesús. Dios ofrece la salvación a todos los hombres quienes aceptan a Cristo como su único y todo suficiente Salvador. La salvación consiste en la regeneración, la justificación, la seguridad, la santificación y la glorificación del creyente. [Efesios 2: 8-10; Efesios 1:3-7; Colosenses 1:9-14]
1. La Regeneración
La regeneración o el nuevo nacimiento es obra de la gracia de Dios en que el creyente viene a ser una nueva criatura con una nueva naturaleza en Cristo Jesús. Es una obra del Espíritu Santo por la cual convence al hombre de su pecado. El hombre responde arrepintiéndose de su pecado y poniendo su fe en Cristo Jesús. [Juan 3:5; Tito 3:5]
2. La Justificación
La justificación es obra de Dios en que Él declara justo al hombre que se arrepiente y cree en Cristo. No es por los méritos del hombre, sino por los méritos de Cristo. [II Corintios 5:21; Hechos 13:38-39; Romanos 3:24-26; Romanos 5:1]
3. La Seguridad del Creyente
Creemos que todos los creyentes regenerados por el Espíritu Santo están eternamente seguros en Cristo y nunca llegarán a condenación por sus pecados. Esta seguridad no depende del hombre, sino en el carácter y propósito del Padre, la obra del Hijo, y la presencia del Espíritu Santo en el creyente. Como es un privilegio para el creyente regocijarse de una salvación segura, no es una causa, licencia ni libertad de pecar o satisfacer los deseos de la carne. [Romanos 8:38-39; Efesios 1:13-14; Juan 10:28-29; Juan 6:37; Romanos 5:1-2]
4. La Santificación
Creemos que la santificación es la consagración del creyente en que se aparta del mal y sigue fiel a Dios. Es el proceso de maduración del creyente hacia la perfección moral y espiritual por el conocimiento de la Palabra de Dios. Este crecimiento sigue por toda la vida y termina con la glorificación del creyente en la presencia del Señor. [I Corintios 1:1-2; II Corintios 7:1; I Tesalonicenses 5:23-24; Filipenses 3:12-14; Juan 17:17]
5. La Glorificación
Creemos que la glorificación es la culminación de la salvación. Es la transformación total del creyente y su cuerpo en que Él tendrá un ser incorruptible e inmortal. Es el estado final y perfecto del redimido en la presencia de Dios. [Filipenses 3:20-21; I Juan 3:2; I Pedro 1:8-9; I Corintios 15:52-54]
SECCIÓN 5: LA IGLESIA
1. La Iglesia Universal
Creemos que la Iglesia Universal es el órgano espiritual compuesto por todos los creyentes verdaderos de esta época; es el cuerpo de Cristo del cual El es la Cabeza. Su propósito es dar un buen testimonio a todo el mundo y hacer discípulos para Cristo. [I Corintios 12:12-14; Efesios 1:22-23; Efesios 5:23-27; Mateo 28:19-20]
2. La Iglesia Local
Creemos que la Iglesia Local es un grupo de creyentes bautizados quienes se han unido voluntariamente estando de acuerdo en doctrina y administración. La Iglesia Local está organizada según las enseñanzas del Nuevo Testamento con los propósitos de adorar, enseñar y servir. La Iglesia Local es una asamblea autónoma operada por procesos democráticos bajo el señoreo de Jesucristo en que todos los miembros tienen responsabilidades y derechos iguales. Los funcionarios de la Iglesia Local son pastores, ancianos y diáconos. [Hechos. 8:1; Hechos 13:1-3; Romanos 16:5; I Pedro 5:1-4; I Timoteo 3:1-13; Tito 1:5-9; Hechos 6:1-7]
SECCIÓN 6: LAS ORDENANZAS
Creemos que en esta época hay dos ordenanzas (sacramentos) que deben ser celebradas en la iglesia. Estas ordenanzas son el bautismo por agua y la cena del Señor. Los propósitos de estas ordenanzas son para obedecer a Jesús y para testificar de nuestra fe.
1. El Bautismo
Creemos que el bautismo es por inmersión y que es solo para creyentes No es un acto de salvación, sino de obediencia testificando de la fe en la crucifixión, el entierro y la resurrección del Salvador y comparándolo a la muerte del creyente al pecado, en entierro de la naturaleza vieja y la resurrección a la vida nueva. El bautismo seria en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. [Mateo 28:18-20; Hechos 2:41; Hechos 8:36-38; Romanos 6:1-14]
2. La Cena del Señor
Creemos que la cena del Señor debe ser administrada actualmente por la iglesia. No sirve para la salvación, sino es un acto de obediencia y testimonio de los creyentes en el cual se conmemora la muerte de Cristo, se anuncia Su presencia permanente y real, y se anticipa Su segunda venida corporal. [Hechos 2:42, 46; I Corintios 11:17-34]
SECCIÓN 7: LOS DONES DEL ESPÍRITU SANTO
- Creemos que los dones espirituales son para la edificación de la iglesia. Dios da dones espirituales a todos los creyentes para que todos tengan parte en el ministerio de la iglesia. Algunos dones son permanentes y son para el uso actual de la iglesia. Estos incluyen los dones de predicar, servir, enseñar, exhortar, dar, administrar, consolar, evangelizar y pastorear. Otros dones fueron temporales y fueron dados en la época apostólica con el propósito de fundar la iglesia. Estos incluyen los dones de apostolado, nuevas profecías, milagros, sanidades, lenguas e interpretación de lenguas. Creemos que los dones temporales terminaron al completarse el Nuevo Testamento. Creemos que el Espíritu Santo reparte los dones como El quiere. La salvación no depende del uso de ningún don. [Romanos 12:3-8; I Corintios 12:4-11, 28-31; I Corintios 13:8-13; Efesios 4:7-12]
- Creemos que Dios oye y contesta la oración de fe de acuerdo a Su voluntad para los enfermos y afligidos. Las enfermedades no son siempre por causa del pecado o falta de fe. La sanidad no es siempre la voluntad de Dios porque Su poder y misericordia pueden ser manifestados en la debilidad del hombre. [Santiago 5:15; Juan 9:1-3; II Corintios 12:7-10]
SECCIÓN 8: LOS ÁNGELES
Creemos en la realidad y la personalidad de los ángeles, tanto los buenos como los malos. Creemos que los ángeles son seres espirituales creados por Dios. [Hebreos 1:7]
1. Los Ángeles Buenos
Los ángeles buenos son mensajeros de Dios quienes ministran, cuidan y guardan a los creyentes. Hay ángeles también en la presencia de Dios para alabarle y servirle. [Hebreos 1:14; Salmo 34:7; Salmo 91:11; Salmo 103:20; Isaías 6:2-3]
2. Los Ángeles Malos
Creemos que existen ángeles malos, incluyendo a Satanás, quienes han caído de su primer estado. Satanás es el gran enemigo de Dios y del hombre. La oposición de Satanás va en continuo aumento, pero cuya destrucción final es segura. Los ángeles malos cooperan con Satanás en oposición de Dios, de los propósitos de Dios y de la gente de Dios. Los demonios pueden entrar, posesionar y controlar a humanos incrédulos cuando tales humanos les permitan. Los demonios no pueden posesionar a los creyentes, pero pueden tentar e influirles. [Ezequiel 28:11-19; Job 1:6-7; Mateo 25:41; Apocalipsis 20:10; II Pedro 2:4; Judas 6; Efesios 6:12]
SECCIÓN 9: LA VIDA CRISTIANA
- Dos Naturalezas
Creemos que todos los salvos poseen dos naturalezas y que por el poder del Espíritu Santo la naturaleza nueva puede ser victoriosa sobre la naturaleza vieja si el creyente somete el control total de su vida a Cristo. [Romanos 6:13; Gálatas 5:16-25; Colosenses 3:1-10; I Pedro 1:14-16; I Juan 3:5-9; II Corintios 5:17]
- Separación Del Mundo
Creemos que todos los salvos son llamados a una vida de separación de todas las prácticas mundanas y pecaminosas. [Santiago 4:4; Romanos 12:1-2; I Juan 2:15-17; II Corintios 6:14]
- Comunión Con Dios Y Con Los Hermanos En Cristo
Creemos que es la responsabilidad de cada creyente mantener una relación vital con Dios por medio de oración, estudios personales de la Biblia, obediencia a Dios y asistencia regular a los cultos de la iglesia. Creemos que cada creyente debe procurar servir a la iglesia visible de Cristo. [I Tesalonicenses 5:17; I Pedro 2:2; Josué 1:8; I Juan 1:6-7; I Juan 2:3-11; Hebreos 10:24-25]
- Evangelización
Creemos que es deber y obligación de cada creyente dar testimonio con su vida y con sus palabras de las verdades de la Santa Escritura. Creemos que es obligación de los creyentes proclamar el evangelio a toas partes del mundo. [Mateo 28:16-20; Hechos 1:8; II Corintios 5:19-20]
- Mayordomía
Creemos que es responsabilidad de cada creyente apoyar la obra del Señor con sus dones, habilidades, talentos, tiempo, bienes y buenas obras. [Efesios 4:11-16; I Corintios 16:1-2; II Corintios 9:6-7; I Corintios 12; Efesios 2:10]
SECCIÓN 10: EL DISPENSACIONALISMO
(División de la historia de la humanidad en épocas) Creemos que las Escrituras interpretadas en el sentido natural y literal revelan dispensaciones (épocas) determinadas por Dios que definen las responsabilidades del hombre en tales épocas. Las dispensaciones no son caminos a la salvación, sino épocas en que la obediencia del hombre es probada respecto a una revelación específica de la voluntad de Dios. Los objetivos de las dispensaciones son: (a) para revelar al hombre su pecado y depravación; (b) para revelar al hombre su incapacidad de salvarse por si mismo; (c) para enseñar al hombre la necesidad de un sacrificio vicario para el perdón del pecado. Estamos ahora en la época de la iglesia que comienza en el día de Pentecostés y terminar con el rapto de la iglesia.
SECCIÓN 11: LA ESCATOLOGÍA
Creemos en la venida personal e inminente de Cristo en las nubes para recibir y llevar a los redimidos a la gloria. En el rapto de los redimidos, los muertos en Cristo resucitarán corporalmente y junto con los creyentes vivos serán transformados a un cuerpo incorruptible y as vivirán eternamente en la presencia gloriosa de Dios. El rapto de los redimidos será seguido por siete años de tribulación en la tierra. Después de la tribulación, Cristo vendrá corporalmente otra vez a la tierra con los santos para establecer Su Reino Milenario. Durante el Milenio, Satanás será atado en el abismo. Al fin del Milenio, Satanás será desatado por un poco de tiempo y engañará las naciones de todo el mundo, reuniendo de ellos un ejército para la gran batalla final contra Dios. Dios les destruirá y el diablo será lanzado al lago de fuego para siempre. Después, todos los incrédulos resucitarán corporalmente al juicio del Gran Trono Blanco donde serán condenados eternamente a los tormentos del lago de fuego. [I Tesalonicenses 4:13-17; I Corintios 15:51-54; Hechos 1:11; I Tesalonicenses 1:10; Apocalipsis 3:10; Apocalipsis 4-19; Apocalipsis 19:11-20; Zacarías 14:3-11; Apocalipsis 20; Apocalipsis 21:8; Mateo 25:41-46; Juan 5:28-29; Juan 11:25-26]
SECCIÓN 12: PRINCIPIOS DEL MATRIMONIO
- El matrimonio es una institución creada y bendecida por Dios, formada por un hombre y una mujer. [Génesis 1:28; Génesis 2:24-25; Mateo 19:4-6]
- Deben estar casados hasta que la muerte los separe. [Marcos 10:9; 1 Corintios 7:39]
- El hombre y la mujer deben obedecer la Palabra de Dios cumpliendo sus roles cada uno para el desarrollo del matrimonio. [Génesis 3:16-20; Efesios 5:18-33; Colosenses 3:18-19; 1 Pedro 3:1-9]
SECCIÓN 13: SEPARACIÓN Y DIVORCIO
Creemos que la Biblia exalta el matrimonio y ha puesto a la familia como base de la civilización. Creemos que la Biblia enseña que la pareja debe hacer todo para mantener un matrimonio santo. Creemos que no hay evidencia bíblica que apoya el divorcio, puesto que Dios no apoya el divorcio. Sin embargo, reconocemos que en nuestras iglesias existen personas separadas y divorciadas y con estas personas la Asociación quiere mostrar todo el amor de Dios; reconciliar su matrimonio, animarlos a ser miembros en la iglesia local y a utilizar sus dones en la edificación del Cuerpo de Cristo.
El mandato divino para estas personas es buscar la reconciliación y en este caso con el liderazgo de la iglesia actuará para lograrla.
- Reconciliación en el matrimonio es lo que Dios quiere para la pareja. [I Corintios 7:10]
Para los que son divorciados no pueden seguir en los cargos como: ser pastores, ancianos diáconos, y diaconizas dentro de las iglesias de la Asociación. [I Timoteo 3:2; Tito 1:5] Los animamos a servir en la Iglesia en diferentes áreas que haya necesidad.
SECCIÓN 14: MINISTERIO DE LA MUJER EN LA IGLESIA LOCAL
Creemos que la mujer tiene un rol muy importante en la iglesia local. Así como también creemos que Cristo quien es la Cabeza [Colosenses 1:18], de la iglesia, ha dejado claramente establecido que el pastoreo de la iglesia está entregado a los varones [1 Corintios 11:3].